1 de April de 2020 por Lucette Talamas
Ansiedad intensa—Los niños, la escuela y el estrés: Lo que debe buscar en su hijo, y cómo lo puede ayudar
La llegada del nuevo año escolar está acompañada de bastante estrés y ansiedad, tanto para los estudiantes como para sus padres. Estar consciente de los factores estresantes que enfrentan sus hijos – y reconocer cuando la ansiedad comienza a interferir en sus vidas diarias – puede ayudar a mantenerlos contentos, saludables y listos para enfrentar los retos por venir.
En el artículo de la semana pasada, Rachel V.F. Rohaidy, M.D., psiquiatra con Baptist Health que se especializa en la intervención, el diagnóstico y el tratamiento de trastornos mentales, adictivos y emocionales, habló de los factores estresantes que afectan a los adolescentes, y cómo sus cerebros que aún están en desarrollo pueden verse afectados por las drogas y el alcohol que pueden tomar para ayudar a aliviar su ansiedad y para ser aceptados en la escuela.
Entonces, ¿cómo saber si su hijo está enfrentando problemas con la ansiedad? ¿Cuáles son las señales que usted debe buscar? Pero lo más importante es, ¿qué puede hacer usted para ayudarlo?
“Hay que estar bien compenetrado dentro de la vida de sus hijos para estar consciente de lo que están atravesando”, afirmó la Dra. Rohaidy. “Los adolescentes no tienen el vocabulario emocional para expresar lo que están sintiendo o por qué se siente de esa manera. Como resultado, se pueden notar muchos síntomas somáticos. Los dolores de cabeza son bastante comunes, así como también los síntomas gastrointestinales tales como los dolores de estómago, nausea o diarrea”.
Otras cosas de las que hay que estar al tanto incluyen los cambios repentinos en el comportamiento; aislamiento, estallidos de ira; tristeza o llanto y un descenso repentino en las notas escolares.
“Si usted ve que su hijo no puede salir de su cuarto, ni vestirse para la escuela en las mañanas, o que no se están cuidando a sí mismos, o que no pueden completar los proyectos escolares o hacer amistades, todas esas son señales de alerta”, dice la Dra. Rohaidy. “Cuando su ansiedad se pone tan intensa que no los deja funcionar del todo, ahí es cuando usted debe buscar ayuda profesional por parte de un psiquiatra o de un terapeuta”.
Los medicamentos pueden ayudar, según la Dra. Rohaidy, pero eso debe ser parte de un enfoque holístico que incluye ejercicio, cambios en la dieta y terapia de diálogo.
“Comenzamos con un antidepresivo como Celexa, Lexapro, Prozac o Zoloft, porque muchos de los síntomas y las neuronas de la depresión y la ansiedad se sobre imponen”, dice ella. “Pero no existe una píldora mágica – yo los empujo para que encuentren maneras saludables de aliviar su estrés”.
Puede ser una idea antigua, pero la Dra. Rohaidy sugiere una cena en familia por lo menos una vez por semana (¡guarden los teléfonos celulares!) para estimular las conversaciones relajadas en la mesa. También pongan atención a lo que sus adolescentes están mirando en televisión, miren televisión con ellos y haga preguntas después.
“También deles espacio cuando lo necesitan”, advierte la Dra. Rohaidy.
Ser un modelo de maneras saludables para aliviar el estrés en su vida es muy útil. En vez de aliviar su estrés después del trabajo con una copa o dos (o más) de vino, busque otras actividades más saludables que puedan reducir el estrés – pasatiempos como el ejercicio, el yoga o cualquier actividad que le ayude a relajarse. Los niños sí se dan cuenta, aunque no lo admitan.
Mejor aún, encuentre actividades que puedan hacer todos en familia, en particular las actividades al aire libre como ir a la playa, montar bicicleta o salir de caminata.
“Las actividades más gratificantes son aquellas que ofrecen oportunidades para devolver algo a la comunidad de forma significativa”, dice la Dra. Rohaidy. “Participar en limpiezas de playas y parques o ayudar a alimentar a los residentes de asilos para desamparados puede ayudar a unir a las familias, abrir las líneas de comunicación y aumentar la confianza”.
Lo más importante según la Dra. Rohaidy es tomar acción.
“No sea complaciente”, aconseja ella. “No asuma. Confíe en su intuición. Sea proactivo. Si ve algo, hable de ello. Acérquese a ellos y conversen”.
Si su hijo necesita ayuda para lidiar con la ansiedad o con los problemas de adicción, existen muchos recursos disponibles en la comunidad. Pídale ayuda a su pediatra o a su médico de atención primaria o busque recursos comunitarios para adolescentes por internet. En Miami-Dade hay varios recursos para adolescentes en situaciones difíciles – La línea Teen Link, la línea Teen Talk Hotline y la línea de ayuda 211.
A fin de cuentas, su meta como padres es equipar a sus hijos con la sabiduría y la capacidad emocional que necesitarán una vez abandonen el nido. No siempre es fácil y hay muchos obstáculos y muchos baches por el camino. Ser vigilante y estar envuelto puede mantener a sus hijos marchando por el camino correcto y fuera de peligro durante esos turbulentos años de la adolescencia.
Noticias más importantes
There are no comments