Aneurismas Cerebrales: Conozca la Realidad y las Opciones de Tratamiento

Move Down to Article

Compartir


Escrito por


Publicado

22 de May de 2013


Artículos Relacionados    


This post is available in: Inglés

La mayoría de las personas reconocen la gravedad de un aneurisma cerebral. Pero muchos desconocen que hay opciones de tratamiento que salvan vidas para la estimada 1 de cada 50 personas que sufre una forma – no rota – de este trastorno.

Cada 18 minutos se rompe un aneurisma cerebral. Cuando esto sucede, son fatales en el 40 por ciento de los casos.

Cerca de dos tercios de aquellos que sobreviven la ruptura sufren algún tipo de incapacidad neurológica permanente.

Sin embargo, la mayoría de los aneurismas no necesariamente tienen consecuencias tan nefastas.

De acuerdo con un nuevo estudio, aun los pacientes que sufren la forma más fatal de un accidente cerebral hemorrágico, incluyendo un aneurisma cerebral que se rompe, tienen un 40 por ciento mejor oportunidad de sobrevivir cuando se les trata en un hospital de alto volumen) uno que trata más de 35 casos al año), comparado con pacientes ingresados en centros de bajo volumen (aquellos que tratan menos del 10 por ciento de casos al año).

El estudio encontró que la disponibilidad de médicos y enfermeros especializados, junto con la tecnología y protocolos establecidos, eran factores de éxito primarios. Los médicos de Baptist Hospital tratan más de 100 aneurismas cerebrales al año.

Un estimado del 50 al 80 por ciento de todos los aneurismas no se rompen durante el curso de la vida de una persona.

Un aneurisma cerebral es un bulto anormal en la arteria cerebral que se desarrolla cuando la pared de un vaso sanguíneo se debilita.

Cerca del 1.5 al 5 por ciento de la población general tiene o desarrollará un aneurisma cerebral. Esto es de 3 a 5 millones de personas en los Estados Unidos, pero la mayoría no muestra ningún síntoma. Un pequeño porcentaje pudiera sufrir algún sangrado.

“Sin embargo, un aneurisma puede producir síntomas según se agranda, incluyendo dolores de cabeza o dolor localizado. Si un aneurisma crece mucho, podría producir presión en el tejido cerebral normal o los nervios adyacentes”, explica el Dr. Jack Klem, director médico de cirugía cerebrovascular en el Centro de Neurociencias Baptist Health. “Esta presión puede causar dificultad con la visión, entumecimiento o debilidad en un brazo o pierna, dificultad con la memoria o el habla, o convulsiones”.

El Dr. Klem acompañará al Dr. Sergio González-Arias, director médico del Centro de Neurociencias Baptist Health y al Dr. Italo Linfante, director médico del Centro de Neuroradiología Intervencionista, el jueves, 23 de mayo, cuando mostrarán a los espectadores durante un webcast Baptist Health South Florida cómo se repara un aneurisma cerebral utilizando una técnica mínimamente invasiva.

El procedimiento, una embolización endovascular (o de espirales), es una nueva opción de tratamiento para pacientes que han sido diagnosticados con un aneurisma cerebral. El procedimiento toma cerca de dos horas y los pacientes por lo general pueden volver a casa al día siguiente.

El objetivo de los espirales es sellar con seguridad el aneurisma para evitar que más sangre entre a ese bulto anormal, lo cual aumenta el riesgo de ruptura o posible sangrado.

La técnica envuelve insertar un catéter en la ingle del paciente y deslizarlo a través de los vasos sanguíneos hasta el cerebro auxiliado por la guía de rayos-X.

A través del catéter, el médico utiliza otro tubo para depositar espirales de platino al llegar el aneurisma, bloqueando la circulación de sangre. Esto se ha convertido en un tratamiento que posiblemente salva vidas para aneurismas que antes se consideraban inoperables. Es el método preferido para tratar aneurismas cerebrales.

“Esta opción es muy esperanzadora para todos los pacientes con aneurismas cerebrales, incluyendo aquellos a quienes pudo habérseles dicho anteriormente que sus aneurismas eran inoperables”, concluye el Dr. Linfante.

Durante la transmisión, también se discutirán los enfoques tradicionales más complejos con los que se tratan los aneurismas cerebrales. Esta opción requiere una incisión en el cuero cabelludo y después retirar una parte del cráneo. La arteria afectada por el aneurisma se localiza usando un microscopio.

Un neurocirujano inserta una presilla de metal en la base del aneurisma. Esto sirve para cortar la circulación de sangre y por lo tanto destruir el aneurisma. La parte retirada del cráneo se recoloca y la incisión se sutura.

Los neurólogos y neurocirujanos consideran muchos factores antes de hacer recomendaciones de tratamiento, incluyendo:

  • El tamaño y lugar donde está el aneurisma
  • Su edad y salud general
  • Historia familiar de aneurismas rotos
  • Condiciones congénitas que aumentan el riesgo de un aneurisma roto

Los tratamientos para aneurismas cerebrales rotos se enfocan en aliviar los síntomas y controlar las complicaciones. Incluyen medicamentos e intervenciones para evitar el accidente cerebral debido a la circulación insuficiente de sangre. También hay procedimientos para disminuir la presión en el cerebro por el exceso de fluido asociado con un aneurisma roto.

Pero tratar aneurismas temprano es vital, por lo que es importante conocer los factores de riesgo.

Una persona puede heredar la propensión a aneurismas, o los aneurismas pueden desarrollarse por endurecimiento de las arterias (aterosclerosis) y envejecimiento.

Los factores de riesgo incluyen historia familiar de aneurismas, género, raza, hipertensión (alta presión arterial) y fumar.

Anualmente, suceden casi 500,000 muertes por todo el mundo causadas por aneurismas cerebrales, y la mitad de las víctimas son menores de 50 años.

“Controlar los factores de riesgo para evitar futuros aneurismas puede requerir cambios en la dieta y ejercicios para controlar la presión arterial, los niveles de colesterol y controlar la salud general del corazón”, dijo el Dr. Klem.

Lea sobre una pareja, comprometida para casarse, que sobrevivieron aneurismas cerebrales en los que peligraban sus vidas.