8 de April de 2020 por Adrienne Sylver
Abril es el mes de la concientización del alcohol
Muchos pueden decir que el alcohol es una parte integral de la vida estadounidense. La mayoría de los restaurantes sirven cerveza y vino, y muchos también sirven licor. Para la mayoría de las personas, el uso del alcohol en moderación no es problema. Sin embargo, el alcohol es un verdadero problema para un gran número de personas en los Estados Unidos.
En el 2014, 17 millones de adultos de 18 años y mayores (un 7.2 por ciento de la población), habían sido diagnosticados con un (AUD por sus siglas en ingles) “trastorno por consumo de alcohol”, según los National Institutes of Health. Para muchos, este trastorno crónico, progresivo y potencialmente fatal puede llevar a condiciones dramáticas que pueden hacer daño no solamente a la salud física de una persona, pero también a su familia y a su vida social y de trabajo.
Estadísticas que dan a pensar
Casi 88,000 personas (aproximadamente 62,000 hombres y 26,000 mujeres) mueren anualmente por una causa relacionada con el alcohol en los EE.UU., haciendo al alcohol la cuarta causa principal de muerte prevenible en los Estados Unidos, según las estadísticas federales. El uso problemático del alcohol también aumenta el riesgo de otras condiciones médicas, incluyendo los problemas del corazón, los trastornos del hígado y de los riñones, y hasta la obesidad y la diabetes.
El alcohol también contribuye a casi un tercio de todas las fatalidades de tránsito. En el 2014 solamente, las fatalidades relacionadas con los conductores afectados por el alcohol sumaron a 9,967 muertes (un 31 por ciento de todas las fatalidades de tránsito), según el National Institute on Alcohol and Abuse and Alcoholism.
Salud y Esperanza
Mientras que muchas familias han sido afectadas de una forma u otra por el uso excesivo del alcohol, hay esperanzas. Hoy en día más que nunca, las personas con trastornos por consumo de alcohol están recibiendo tratamiento de clase mundial y basado en la evidencia. Más médicos están aprendiendo cómo identificar los problemas de alcohol en sus pacientes de manera temprana, usando herramientas de detección en los consultorios privados y en los centros de atención primaria.
Los hospitales y los sistemas de salud como Baptist Health South Florida, también están entrenando a más trabajadores sociales, coordinadores de atención, enfermeros y otros profesionales aliados de la salud para intervenir en la atención de los pacientes y sus familias con educación, comprensión, bondad y compasión. Con el estigma que a menudo acompaña a los problemas de alcohol y de drogas, un enfoque de “amor primero” es el medio por el cual – y a menudo la única forma en comparación con el enfoque anticuado de “amor severo” – que alguien puede recibir ayuda de verdad para su problema de alcohol.
Para los que sí necesitan tratamiento, los avances en el campo de la Medicina de la Adicción – tales como las técnicas terapéuticas utilizadas en el Addiction Treatment & Recovery Center de South Miami Hospital, una parte integral de la comunidad del Sur de la Florida por 40 años – significan que los hombres y las mujeres que sufren de un trastorno por consumo de alcohol pueden recibir una evaluación apropiada, el diagnóstico correcto para su condición y emprender en el camino hacia la recuperación. La combinación correcta de asesoría individual, terapias de grupo, apoyo en 12 pasos, dieta y nutrición, y ejercicios son ingredientes esenciales para la atención adecuada de cualquier persona que tenga un problema de alcohol.
El alcohol es una sustancia legal que la mayoría de las personas pueden consumir sin ninguna consecuencia negativa. Pero si usted piensa que alguien que usted conoce puede tener un problema con el alcohol, o si le gustaría obtener más información acerca de cómo podemos ayudarle, póngase en contacto con el Addiction Treatment & Recovery Center de South Miami Hospital en cualquier momento, las 24 horas del día y los 7 días de la semana, llamando al 786-662-8118 o 1-800-YES-HOPE.
Acerca del Autor
David Vittoria es el vicepresidente auxiliar del Addiction Treatment & Recovery Center de South Miami Hospital.
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