7 de April de 2020 por John Fernandez
10 Consejos para una parrilla más sana
El sabor de la limonada, el maíz asado, las hamburguesas y los días de campo nos traen recuerdos de veranos felices. Sin embargo, las parrilladas podrían hacernos daño a menos que los alimentos sean almacenados, preparados y cocinados correctamente.
Manejar mal los alimentos puede conducir a la indigestión, vómitos o estancias en el hospital. Recientemente, un adolescente de Seattle se enfermó gravemente cuando una cerda de un cepillo de la parrilla quedó dentro de una pieza de pollo que comía.
Usted puede minimizar los riesgos a la salud mediante el uso de alimentos seguros y el buen manejo de la parrilla, según el especialista en medicina interna, Dr. Tomás Villanueva , DO, quien también es vicepresidente adjunto y director médico de Baptist Health Medical Group.
Antes de la parrilla:
1. En el supermercado, busque carne al final. Mantenga la carne cruda lejos de otros alimentos en su carrito. A la salida, pida que le envuelvan las carnes y aves en bolsas de plástico. Esas medidas deben evitar que los jugos de carne cruda (que pueden contener bacterias nocivas) goteen sobre otros productos.
2. Lleve sus compras a casa tan pronto como sea posible. Los artículos perecederos deben ser refrigerados dentro de dos horas, pero en menos 60 minutos si la temperatura exterior es superior a 90° F, de acuerdo con las autoridades federales de salud.
3. Prepare con las manos limpias. Lávese las manos durante un mínimo de 20 segundos con agua tibia y jabón. Inspeccione su equipo de cocina, incluyendo la parrilla y las brochas para carne.
“Limpie las superficies con frecuencia”, dijo el Dr. Villanueva. “Las bacterias de la carne poco cocinada pueden crecer en las verduras que se hayan cortado o lavado en la misma superficie como la carne. Mezcle y utilice una solución desinfectante de una tapa de blanqueador de cloro por galón de agua para la limpieza de superficies del área de trabajo”.
4. Coloque los alimentos que se estén marinando en la nevera. Debe deshacerse de los adobos que se utilicen para marinar carnes y aves crudas no usarlas en los alimentos cocinados. “No pruebe el adobo o volver a usarlo después de añadir la carne cruda”, acertó el Dr. Villanueva.
5. Precaliente la parrilla. Encienda el carbón de 20 a 30 minutos antes de empezar a cocinar.
A la parrilla:
6. Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) recomiendan a cocinar la carne y el pollo completamente, usando un termómetro diseñado para carne para medir la temperatura interna. Cocine la carne molida hasta una temperatura interna de 160° F, filetes y asados hasta 145º F a 160º F, y las aves hasta que alcancen 165° F, según “Safe Food Handling: Seven Super Steps to Safe Food In the Summer”, en una publicación del gobierno.
“Las bacterias como E-coli y Salmonella aún pueden estar presentes en carnes mal cocidas, tales como hamburguesas y pollo. Las bacterias pueden causar enfermedades graves e incluso la muerte”, explicó el Dr. Villanueva. “Por lo tanto, las carnes se deben cocinar a la temperatura adecuada para garantizar la seguridad”.
7. No queme ni “achicharre” los alimentos. Algunas investigaciones sugieren que hay una posible relación entre el cáncer y el consumo de alimentos a la parrilla, fritos o asados a temperaturas extremadamente altas. Para evitar la carbonización, debe recortar la grasa visible. Utilice el horno de microondas para pre-cocinar la carne e inmediatamente colocar el alimento en el centro de la parrilla con carbones adecuadamente calentados hacia un lado. Corte las zonas carbonizadas de la carne.
8. Evite la contaminación cruzada. Coloque la carne cocida en un plato limpio y no en el plato sin lavar que se utilizó para la carne cruda. Use utensilios diferentes para los artículos crudos y cocidos.
9. No debe preparar y servir alimentos si usted ha estado enfermo con vómitos o diarrea en las últimas 24 horas.
10. Enfríe por separado las bebidas y alimentos perecederos. La cava para bebidas que se abre y cierra constantemente durante un día de campo podría poner en riesgo los alimentos perecederos. Mantenga todo fresco empacándolo completamente en hielo.
El verano no sería verano sin asar a la parrilla, pero asegúrese de que usted no esté poniendo su familia en riesgos innecesarios para las enfermedades transmitidas por los alimentos.
¡Buen provecho!
Noticias más importantes
There are no comments