30 de March de 2020 por baptist.admin
Nutrición de verano para los chicos
El verano para niños y familias muchas veces incluye visitas a un parque de diversiones, una aventura en la playa o algún tipo de diversión en exteriores. Pero con dosis de hamburguesas, perros calientes, algodón de azúcar, nachos y helado, usted podría pensar que su familia está destinada a tener unas vacaciones repletas de comidas y meriendas altas en calorías y bajas en nutrición.
“La diversión durante los meses de verano no tiene que significar unas vacaciones de los hábitos alimenticios saludables”, dice Natalie Castro, dietista principal de bienestar para el departamento de bienestar corporativo de Baptist Health South Florida. Ella ofrece estos cuatro consejos para mantener a la familia saludable mientras exploran distintos destinos este verano:
- Hagan un plan. Los viajes largos pueden hacer que los niños pidan más meriendas debido al aburrimiento. Anticipe esto y prepare un plan de acción. Explíqueles cuándo y dónde comerán. Esto les dará estructura y algo a lo cual esperar. Hagan un esfuerzo por adherirse a sus rutinas normales de comidas.
- Lleven sus propias meriendas. Prepárense para el viaje trayendo sus propios artículos de comida. Empaquen frutas frescas, nueces y cereales de granos enteros. En una bolsa o nevera insulada portátil empaque yogur, sándwiches y acompañantes saludables tales como vegetales crudos (zanahorias, tomates cereza, pimentones, etc.), hummus o ensalada de quinua.
- Beban bastante líquido. ¡Hace mucho calor! Manténgase hidratados. Siempre lleve una botella de agua que pueda rellenar. El tener agua a la vista aumenta las probabilidades de que alguien la beba. Tomar agua durante el día previene la deshidratación, cuyas señales básicas son dolores de cabeza, fatiga y confusión.
- Exploren. Busquen opciones para comer en su destino. Hacer esto antes de llegar puede ayudar a reducir el estrés de ver a dónde van a comer. Más y más lugares están ofreciendo alternativas más saludables. No tenga miedo de pedir alguna sustitución al menú tal como una preparación a la parrilla o al horno en vez de frita o una ensalada como acompañante en vez de papitas fritas.
Cómo alimentarse saludablemente durante el verano
Sin un horario de clases regular, las vacaciones de verano a veces pueden convertirse en unas vacaciones de comer sanamente. Refrescarse con algunas golosinas favoritas de verano como los helados y las paletas heladas, junto con la tendencia de consumir más meriendas entre comidas regulares, pueden causar estragos a una dieta balanceada. Castro ofrece estos consejos:
- Mantenga a los niños en un horario de comidas y meriendas: Desayuno, almuerzo, cena y dos meriendas. Esto ayuda a combatir el hambre y detiene el comer sin pensar entre comidas. No deje que entren en la cocina a no ser que vayan a comer una de las tres comidas o una merienda planeada.
- Limite los jugos, las sodas y otros líquidos altos en calorías. Para mantener a los niños hidratados en el calor, deles mucha agua y ayúdelos a evitar las bebidas azucaradas que no tienen ningún efecto para calmar la sed.
- Coman frutas y vegetales. Visite un mercado agrícola con sus hijos y preparen juntos las comidas utilizando ingredientes frescos y sanos. Mejor aún, designe una sección de su patio como un lugar donde su hijo pueda sembrar sus propios vegetales. Deje que su hijo coseche los vegetales y que ayude a decidir qué hacer con ellos.
- Aliéntelos a que estén activos. Limite el “tiempo ante la pantalla” a no más de dos horas al día – eso incluye tanto la computadora como la televisión.
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