Los tratamientos para el TDAH infantil: ¿Demasiados medicamentos? (Infográfica)

Cuando se trata de los niños con el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH por sus siglas en inglés), la terapia del comportamiento puede ser tan beneficiosa como los medicamentos – y sin la potencial amenaza de los efectos secundarios a largo plazo que pueden causar los fármacos por receta, según los Centros Para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés).

“La terapia del comportamiento es un tratamiento efectivo que mejora los síntomas del TDAH sin los efectos secundarios de los medicamentos. Es un primer paso importante para los niños pequeños con TDAH y es más eficaz cuando es administrado por los padres”, dicen los CDC. “Sin embargo, más niños pequeños están tomando medicamentos para controlar el TDAH que recibiendo servicios psicológicos, los cuales pueden incluir la terapia del comportamiento”, reportaron los CDC en la edición reciente de Signos Vitales publicada por la agencia. (Vea la infográfica de abajo)

La definición de TDAH

El TDAH es un trastorno biológico caracterizado por hiperactividad, impulsividad y problemas de atención, dice Javier Hiriart, M.D., pediatra y médico con Baptist Health Primary Care. En los Estados Unidos, alrededor de 6 millones de niños han sido diagnosticados con TDAH. Históricamente, el tratamiento para el trastorno ha estado ferozmente dividido entre dos extremos – no dar medicamentos o medicar en exceso – con reacciones de ambos campos, dice el Dr. Hiriart.

“El péndulo usualmente oscila demasiado hacia un lado o hacia el otro”, dice él. “Tiene que haber un punto intermedio entre los dos campos que sea tanto racional como apropiado”.

Cada niño con TDAH representa una situación única, y el tratamiento para la condición debe ser basado en una variedad de factores, incluyendo la edad y la severidad de la condición, dice el Dr. Hiriart. Los padres deben discutir el comportamiento del niño y las dificultades sociales o académicas con su pediatra o su médico de familia, dice el Dr. Hiriart.

La importancia de los chequeos físicos anuales

Antes de llegar a cualquier conclusión, los padres deben recordar que existe una amplia gama de comportamientos apropiados para la edad, especialmente en los niños más pequeños, dice él. Por ejemplo, algunos pequeñines de edad preescolar pueden sentarse a ver una película entera, mientras que otros se ponen inquietos durante los programas cortos de televisión. Sin embargo, si el nivel de hiperactividad escala a medida que el niño crece, los padres deben pedirle al médico de familia que le haga una prueba al niño para el TDAH o sus condiciones relacionadas.

¿Condiciones parecidas al TDAH?

Los problemas de la vista, la dislexia y otros trastornos del aprendizaje pueden aparentar ser TDAH. La depresión, la ansiedad u otros problemas emocionales también pueden contribuir a la hiperactividad o la falta de atención. Los trastornos del sueño o la falta de sueño suficiente también pueden imitar los síntomas del TDAH, dice el Dr. Hiriart. Todos estos temas y el desempeño académico de un niño son elementos claves en los chequeos anuales de los niños, dice él.

Opciones de tratamiento

Si su hijo recibe un diagnóstico de TDAH, la terapia del comportamiento y un plan individualizado de educación (IEP por sus siglas en inglés) pueden ser lo suficiente para su tratamiento, dice él.

“Sin embargo, algunos casos son demasiado severos y los niños necesitan medicamentos”, dice el Dr. Hiriart. La situación puede ser comparada a los casos de asma en los cuales los niños con casos leves de asma puede que no necesiten el medicamento recetado diariamente – pero los casos severos de asma pueden requerir dosis regulares de medicamentos, con un repaso periódicamente de la necesidad para la continuación del tratamiento.

Es lo mismo en los casos de TDAH, cuando la condición interfiere con el desarrollo de aprendizaje, el desempeño escolar, la salud mental y el autoestima de un niño, dice el Dr. Hiriart. Pero, además del medicamento, los padres deben trabajar de cerca con un terapista, un médico y educadores familiares para crear un plan integral de tratamiento. Los CDC están de acuerdo.

“La mayoría de las familias se beneficiarán de la terapia del comportamiento y existen casos en los cuales los medicamentos pueden ser apropiados. Los proveedores de atención de salud y las familias pueden colaborar en conjunto para asegurar que los niños con TDAH estén recibiendo el tratamiento más apropiado”, dicen los CDC.

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