Hechos alarmantes: El alcohol entre los menores en las universidades

Cuando se trata del abuso de alcohol y el uso entre los menores de edad en las universidades, las estadísticas nacionales identifican una crisis “extremadamente extendida” según el Instituto Nacional de Abuso de Alcohol y Alcoholismo, una agencia del gobierno federal.

¿Cuán común es el abuso de alcohol en las universidades? Aproximadamente cuatro de cada cinco estudiantes universitarios beben alcohol y entre aquellos que beben, el 50 por ciento beben en exceso, según los datos federales.

“Es un problema tremendo. Hay alcohol por todas partes y en muchos recintos universitarios, hay una cultura que alienta la borrachera, las novatadas y el uso de alcohol entre los menores de edad”, dice Gary Silverman, supervisor clínico del Addiction Treatment and Recovery Center de South Miami Hospital.

¿Cuáles son las tendencias?

Los datos son alarmantes para los padres de estudiantes en camino a la universidad entre las edades de 18 a 24 años, dicen los expertos médicos.

La muerte y los accidentes relacionados con el alcohol: Cada año, alrededor de 1,825 estudiantes universitarios mueren a causa de lesiones accidentales vinculadas con el alcohol y casi 600,000 estudiantes resultan lesionados accidentalmente mientras se encuentran bajo la influencia del alcohol, reporta el Instituto Nacional.

Agresiones: Casi 700,000 estudiantes universitarios (entre los últimos años de la adolescencia hasta los 20 años de edad) son agredidos cada año por un compañero que ha estado bebiendo.

Abuso Sexual:  Cerca de 100,000 estudiantes son víctimas de violación o de agresión sexual según los datos federales,

“Aproximadamente un 25 por ciento de los estudiantes universitarios reportan consecuencias académicas por causa del alcohol que incluyen faltar a clases, atrasarse en un curso, malas notas en los exámenes o tareas y malas notas en general”, según un reporte del Instituto Nacional de Abuso de Alcohol y Alcoholismo.

¿Qué factores contribuyen al problema?

Los anuncios de bebidas alcohólicas están por todas partes, dice el Sr. Silverman, señalando las elegantes campañas de mercadeo que muestran fiestas de moda asistidas por jóvenes y atractivos actores y modelos. Es más, la producción y comercialización de cervezas exóticas con sabor a fruta parecen dirigirse deliberadamente a los jóvenes bebedores – especialmente a las mujeres – a quienes puede no gustarle el sabor natural de la cerveza.  

“Las compañías de cerveza y de alcohol lo niegan pero en realidad están dirigiendo sus esfuerzos de mercadeo a los jóvenes”, dice el Sr. Silverman.

Las fiestas con barriles de cerveza y las actividades de bebida promocionadas por los grupos en las universidades incluyendo las fraternidades y sororidades también conducen a las actitudes peligrosas hacia la bebida, según los expertos locales y nacionales.

Y finalmente, los padres también pueden abrir la puerta inadvertidamente al abuso de alcohol al:

Servir alcohol, así como el vino con la cena, a los estudiantes de secundaria y universitarios

Enviar mensajes mixtos de que las drogas están prohibidas pero el uso del alcohol es aceptable.

Proporcionar fácil acceso a la cerveza y el alcohol al no bloquear los gabinetes de licor, las barras y las bodegas de vino, dice Silverman.

“Demasiados muchachos están aprendiendo a beber en su casa”, dice.  

Realidades alarmantes: La prevención

Una fuerte dosis de educación puede “ayudar a reducir la frecuencia y la cantidad de la bebida en las universidades”, según los Institutos Nacionales de Salud, los cuales recomiendan enfocarse en: estudiantes (individuos y grupos) organizaciones universitarias y las comunidades que rodean a las ciudades universitarias.

“El apoyo y la educación familiar también son factores importantes en la prevención del abuso de alcohol entre los menores de edad”, dice el Dr. Silverman. “Es importante dejarle saber a su hijo que beber no es aceptable”.

Las autoridades federales están de acuerdo. “Los estudios demuestran que los estudiantes que escogen no beber a menudo lo hacen porque sus padres conversan con ellos acerca del uso del alcohol y sus consecuencias adversas”, según un comunicado del Instituto Nacional de Abuso de Alcohol y Alcoholismo.