Mientras que la lactancia es un proceso natural, también puede ser un gran reto, especialmente para las madres primerizas. Sin embargo, la lactancia ofrece beneficios de salud incomparables tanto para las madres como para los bebés e inclusive reduce el riesgo para algunas condiciones de salud a largo y a corto plazo, según los Centros Para el Control y la Prevención de Enfermedades de los EE.UU. (CDC por sus siglas en inglés).
Como parte del enfoque durante el Mes Nacional de la Lactancia Materna, Baptist Health South Florida auspició una discusión de Facebook Live [1] en inglés, resaltando algunos de los retos que enfrentan las madres mientras están lactando, así como también algunas de las mejores maneras de sobreponerse a esos retos.
Los beneficios de la lactancia
Las células, las hormonas y los anticuerpos en la leche materna ofrecen una protección única para los bebés. La lactancia también ayuda a las madres a volver a su tamaño y peso normal antes del embarazo, según la asesora de lactancia de Homestead Hospital Carey Acosta y la educadora clínica para de maternidad Nancy Martinez, también de Homestead Hospital.
Los bebés que han sido lactados tienen un riesgo reducido de:
- Asma
- Obesidad
- Infecciones de oído e infecciones respiratorias
- Síndrome de Muerte Súbita del Lactante (SMLS) (SIDS por sus siglas en inglés)
- Infecciones gastrointestinales (diarrea/vómitos)
- Enterocolitis necrotizante (NEC por sus siglas en inglés) para los bebés prematuros
Las madres que amamantan a sus bebés tienen riesgos reducidos para:
- Presión alta
- Diabetes tipo 2
- Cáncer ovárico
- Cáncer de seno
¿Cuáles son algunos de los retos más comunes de la lactancia?
A pesar de los muchos beneficios de la lactancia, para algunas madres, esto puede ser algo abrumante e inclusive puede afectar a la madre de manera física y mental. Los retos comunes incluyen:
- Pezones adoloridos
- Producción escasa de leche
- Congestión de los senos
- Conductos lácteos tupidos
- Infecciones de los senos
- Infecciones fúngicas
- Pezones invertidos, planos o engrandecidos
- Huelga de lactancia materna
Sin embargo, según Acosta y Martinez, existen remedios para ayudar con cada uno de estos retos, ya sea utilizando cobertores de pezones, sacándose la leche con una bomba y almacenándola, y hasta emplear distintas posiciones para amamantar al bebé – la posición de cuna, acostada y la posición de balón de futbol.
No importa si el bebé nació por parto natural, por cesárea o por alumbramiento prematuro, tanto Acosta como Martinez dicen que la lactancia materna sí es posible para estos bebés. Sin embargo, esta es otra idea errónea que tienen muchas madres.
“Las mamás piensan que si tienen una cesárea no podrán tener la misma experiencia [de lactancia], pero sí se puede”, dice Martinez. “Lo otro es tener un alumbramiento prematuro…o un bebé enfermo…puede que usted no pueda lactar en ese momento preciso, pero queremos estar seguras de que usted entienda que si la lactancia estaba en sus planes, aún existen maneras en las cuales usted puede amamantar a su bebé”.
Apoyando a las madres en su lactancia
Según los CDC, solamente 1 de cada 4 bebés es lactado exclusivamente como es recomendado, hasta los 6 meses de edad. Y un 60 por ciento de las madres dejan de amamantar a sus bebés antes de lo planeado. Esto se debe en gran parte a la falta de apoyo durante la lactancia materna. Cuando se trata de grupos de apoyo, “hay muchas mamás que no asisten o no tienen como asistir y por consecuencia, se quedan solas”, dice Martinez. “Queremos asegurarnos de que las madres estén conscientes de que la depresión posparto es algo real…y de que estas busquen ayuda para obtener el apoyo que necesiten”.
Acosta y Martinez dicen que una gran manera de encontrar apoyo es con la aplicación Care on Demand [2] donde los servicios de lactancia están disponibles desde su teléfono celular o su tableta.
También hay muchos eventos de asesoría de lactancia donde las madres primerizas pueden conectarse, compartir y aprender de las experiencias las unas de las otras.
Desmintiendo los mitos
Mito #1: El tamaño de sus senos determinan la cantidad de leche que una madre produce.
Hecho: “Eso no es cierto. El tamaño no importa”, dice Martinez. “Solamente el uno por ciento de la población no puede producir leche, así que siempre y cuando usted amamante a su bebé, usted podrá producir leche”.
Mito #2: Si usted se toma una copa de vino, tiene que sacarse la leche y botarla.
Hecho: “Sacarse la leche y botarla es sólo para que no se le congestionen los senos”, dice Acosta. Usted se puede tomar una copa de vino, pero no una copa gigante…estamos hablando de 4 onzas y todo en moderación”.
Mito #3: Si usted se enferma, tiene que dejar de lactar.
Hecho: “Dejar de lactar a su bebé no es recomendable, aunque usted esté enferma”, dice Martinez. “Lávese bien las manos, no tosa arriba del bebé, pero sí puede lactar”.
Mito #4: La lactancia es hereditaria.
Hecho: “Cada bebé es distinto y cada embarazo es distinto, así que eso no tiene nada que ver con la herencia”, dice Acosta.