Si está buscando algo más por lo cual estar agradecido esta semana, puede empezar por la fiesta de Thanksgiving (el Día de Acción de Gracias).
Esta fiesta estadounidense nos permite dedicar un día entero al agradecimiento, una práctica que ha sido vinculada tanto con el bienestar físico como con el emocional, según investigaciones científicas.
Los científicos en el campo relativamente nuevo de la psicología positiva han encontrado que las personas agradecidas son más felices, tienen menos estrés de mente y cuerpo y son a fin de cuentas más saludables.
¿Cómo pueden el agradecimiento y la expresión de gratitud tener efectos tan positivos?
“La gratitud conduce a la adaptación y a la capacidad de lidiar con el estrés”, dice el Reverendo Guillermo Escalona, director de educación pastoral de Baptist Health South Florida. “Nos ayuda a volvernos a parar luego de experimentar dificultades y nos enseña a evitar el ver las crisis o los momentos difíciles como problemas terribles”.
¿Qué es el estrés?
El estrés es en realidad la respuesta del cerebro a cualquier demanda dice el National Institute of Mental Health. En dosis pequeñas, los químicos y las hormonas que descarga el cuerpo pueden prepararle para enfrentar una situación que pueda amenazar la vida y hasta pueden fortalecer el sistema inmunológico. Sin embargo, la descarga prolongada o regular de estos químicos y hormonas puede disminuir la inmunidad y causar que nuestros sistemas reproductivos, digestivos y excretores funcionen de manera incorrecta. Para las personas que sufren de estrés constantemente, la respuesta del cuerpo continúa hasta después que termina la amenaza.
El estrés crónico puede causar alta presión sanguínea, problemas del corazón, depresión, condiciones de la piel, asma, dolores de cabeza y otros trastornos. Una encuesta de médicos primarios y de familia encontró que el 75 a 90 por ciento de las visitas al médico son para tratar problemas relacionados con el estrés. Según la Occupational Safety and Health Administration (OSHA) el estrés también es un peligro en el lugar de trabajo, costándole a las empresas estadounidenses más de $300 billones de dólares al año.
¿Un día de agradecimiento o un día de estrés?
A pesar de la conmovedora historia de Thanksgiving, la alegría de ver a los familiares y amigos y la imagen de las mesas repletas de los platos festivos favoritos, el día nacional del agradecimiento puede convertirse rápidamente en un día de estrés.
Los viajes, el trabajo asociado con la preparación y la limpieza después de las grandes cenas y las tensiones familiares también pueden oscurecer el día – robándonos una dosis gigante de felicidad y bienestar.
Estos consejos de cómo practicar el agradecimiento pueden hacer sus fiestas, y todos los días, más significativos para usted y para su familia, mientras ayudan a mantenerle más saludable.
• Practique el agradecimiento por las cosas pequeñas. Esté agradecido por encontrar un espacio donde estacionarse, por probar un helado, por una luz verde y por otras pequeñas ventajas.
• Escríbalo en su diario o en los medios sociales. Escribir las cosas por las cuales se siente agradecido pone los eventos de nuestras vidas en perspectiva. En esta era de las redes sociales, dice el Rev. Escalona, compartir nuestro agradecimiento con los amigos y la familia a través de los medios sociales puede ayudar a propagar el sentimiento de bienestar.
• Trate las situaciones y los colegas estresantes en el trabajo con agradecimiento. “Comience a ser, como dijo Ghandi, el cambio que desea ver en el mundo. Exprese su agradecimiento a sus compañeros de trabajo, clientes, pacientes y familias”, dice el Rev. Escalona. “Comenzará a darle alas al alma. Usted se convertirá en un cómplice de la virtud”.
• Enfóquese en estar agradecido por lo bueno que tiene cada persona. Tiene relaciones difíciles con miembros de su familia? Usted encuentra lo que busca. Busque motivos por los cuales estar agradecido.
• Cree una nueva tradición de Thanksgiving. En lugar de simplemente dar las gracias por la comida, exprese palabras de agradecimiento personales a las personas alrededor de la mesa. Esto no solamente añadirá alegría a la fiesta, pero las fuertes relaciones familiares también están vinculadas con el bienestar físico y mental.