La cifra de niños menores de seis años que están siendo llevados con urgencia a las salas de emergencia luego de haberse tragado objetos pequeños – especialmente artículos como baterías tipo botón, monedas y piezas de juguetes – prácticamente se ha duplicado en el transcurso de dos décadas, según un nuevo estudio.
Más de 759,000 niños se tragaron objetos y fueron llevados a los departamentos de emergencia de los hospitales durante el período de 20 años del estudio, desde el 1995 hasta el 2015. La tasa anual aumentó desde 9.5 de cada 10,000 niños en el 1995 a 18 de cada 10,000 niños en el 2015, un aumento de más de un 90 por ciento, según el estudio publicado en la revista Pediatrics [1].
Los investigadores utilizaron el National Electronic Injury Surveillance System, operado por la U.S. Consumer Product Safety Commission [2] (CPSC), para determinar el número de niños menores de 6 años que fueron atendidos en las salas de emergencia a través de los Estados Unidos luego de haberse tragado algún objeto.
Las monedas – mayormente los centavos – fueron el objeto que fue tragado más a menudo, seguido por los juguetes pequeños (las canicas principalmente) o las piezas de juguetes más grandes, la joyería y las baterías. El aumento en los juguetes o dispositivos electrónicos que utilizan las pequeñas baterías redondas tipo “botón” encabezaron la lista. Aun siendo tan pequeñas, las baterías de botón pueden atascarse en el esófago y causar lesiones tipo quemaduras que pueden causar daños y perforaciones de los tejidos.
Los varones tenían más probabilidad de tragarse objetos que las niñas: un 53 por ciento versus un 47 por ciento. Los varones también tenían más probabilidad de tragarse tornillos y clavos. Las niñas tenían más probabilidad de tragarse joyería y artículos para el cabello.
“Vemos artículos en las tiendas y asumimos que si están en una tienda, deben ser seguros. Pero ese no siempre es el caso”, afirmó Joseph Scott, M.D. [3], jefe y director médico de medicina de emergencia en West Kendall Baptist Hospital [4].
La CPSC, junto con otras organizaciones tales como Kids In Danger y la Toy Association urgen a los consumidores a que sigan las recomendaciones para las edades en los empaques de los juguetes. A pesar de las campañas de seguridad en contra de los juguetes peligrosos y el monitoreo constante, hay productos vendidos que pueden ser potencialmente peligrosos para los niños si son tragados.
De las 251,700 lesiones estimadas que fueron tratadas en las salas de emergencia asociadas con los juguetes en el 2017, un 73 por ciento (184,000) fueron sostenidas por niños menores de 15 años; un 69 por ciento (174,300) involucraron a niños de 12 años o menores; y un 36 por ciento (89,800) afectaron a niños menores de los 5 años de edad.
“Sea vigilante y no asuma que un juguete es seguro”, aconseja el Dr. Scott. “Trate de anticipar lo que pudiera ocurrir. No es bueno asumir lo peor todo el tiempo, y queremos que nuestros niños se diviertan, pero debemos darnos cuenta que siempre existe un riesgo”.
Los siguientes consejos para los padres son por parte de la CPSC y otros grupos de interés público:
- Chequee las etiquetas: Siga las directrices para las edades y otra información en el paquete (la clasificación por edades está basada en inquietudes de seguridad y en la adecuación para el desarrollo de los niños).
- Evite los juguetes con piezas pequeñas, así como también las canicas y las pelotas pequeñas para niños menores de tres años.
- Asegúrese que los juguetes de peluche tengan características adecuadas para la edad del niño tales como narices y ojitos bordados o asegurados para los niños más pequeños y costuras reforzadas para aguatar los juegos de los niños mayores.
- Tenga cuidado con los imanes: Los juegos de imanes de alto poder representan un riesgo de seguridad para los niños – desde los párvulos hasta los adolescentes. Los niños se han tragado los imanes sueltos causándoles serias lesiones intestinales.
- Escoja juguetes que concuerden con los intereses de sus hijos y con sus habilidades, así como también con el entorno de juego de su familia.
- Compre equipo de seguridad. Asegúrese de incluir cascos para los scooters, patinetas y otros juguetes que se pueden montar. Los cascos deben ser usados adecuadamente en todo momento y deben tener el tamaño adecuado para quedar ajustados.
- Conozca al detallista. Compre juguete solamente de detallistas a los cuales conoce y en los cuales confía.