¿Podrían ser los últimos medicamentos recetados para la dieta la respuesta a la epidemia de obesidad que enfrenta el país? Para millones de estadounidenses en busca de una cura, los anuncios optimistas y las últimas investigaciones pueden parecer señalar hacia los medicamentos para bajar de peso como una solución.
Las investigaciones demuestran que todos los cinco medicamentos aprobados por la Administración de Drogas y Alimentos (FDA por sus siglas en inglés) son eficaces, aunque algunos son más eficaces que otros y todos tienen efectos secundarios. Sin embargo, los médicos advierten que si usted está buscando una solución a largo plazo para bajar de peso, no va a encontrarla en las repisas de las farmacias. Los fármacos son un complemento para un plan para perder peso prescrito por un médico – no el plan en si.
Sin embargo, los pacientes tienen esperanzas, visitando regularmente los consultorios de los médicos para pedir recetas.
“Hay pacientes que vienen a su primera visita pidiendo medicamentos para bajar de peso. La mayor parte del tiempo quieren comenzar a tomar los medicamentos de inmediato”, dijo Patricia Feito-Fernandez, M.D. [1], doctora de medicina primaria con Baptist Health Primary Care. [2] “Lo que la gente tiene que entender es que no es tan fácil como suena. Los medicamentos no van a curar el problema”, dijo la Dra. Feito. “Se trata más bien de los hábitos y del estilo de vida. Ese es el factor número uno que los pacientes deben modificar antes de considerar los medicamentos para bajar de peso. Los medicamentos no son una solución rápida”.
Hay que eliminar las posibles causas
Su médico de atención primaria probablemente no va a darle una receta para un medicamento para la dieta de inmediato. Un peso corporal poco saludable a menudo viene acompañado de otras serias condiciones de salud que deben ser tomadas en cuenta en cualquier plan para bajar de peso. Los medicamentos recetados para la dieta pueden causar efectos secundarios significativos para algunas personas, dependiendo de su condición de salud.
“No es algo que hacemos de inmediato”, dijo la Dra. Feito-Fernandez. “Todo depende de cuáles sean sus riesgos y cómo estén de salud en general”.
Visitar a su médico primario es un buen primer paso sin embargo, porque además de evaluar su salud en general, el médico debe eliminar las causas potenciales de un aumento extremo de peso antes de recetar cualquier medicamento, incluyendo los problemas del metabolismo u otras anormalidades.
“La mayoría de los pacientes no se dan cuenta de que pueden haber factores secundarios que pueden estarles causando problemas de peso”.
‘Primero los pongo a dieta’
Además de la pruebas de laboratorio, la Dra. Feito-Fernandez dijo, ella entrevista a los pacientes a fondo para obtener un panorama completo de su historial médico y de sus hábitos de comportamiento. Luego, ella hace lo que la mayoría de los pacientes probablemente menos esperan.
“Primero los pongo a dieta”, dijo ella, “Los mando a ver a nuestra nutricionista en conjunto con nuestro equipo de obesidad. Yo receto un plan de tres meses para bajar de peso donde puedo ver cómo les va con la dieta y con los cambios al estilo de vida antes de tan siquiera considerar los medicamentos para bajar de peso”.
Continuar con los malos hábitos de alimentación mientras se están tomando medicamentos para bajar de peso puede resultar en serios efectos secundarios.
Los Centros Para el Control y la Prevención de Enfermedades de los EE.UU. (CDC por sus siglas en inglés) estiman que alrededor de un tercio de los estadounidenses son obesos. Los medicamentos para bajar de peso pueden ser recetados para las personas con un índice de masa corporal (IMC) de 30 o más. Si usted tiene por lo menos un factor de riesgo vinculado con la obesidad tal como la diabetes tipo II o la presión alta, y un IMC de 27 o más, su médico también puede recetarle un medicamento para bajar de peso.
Las investigaciones han demostrado que perder tan solo un 5 por ciento de su peso inicial reduce su riesgo para la diabetes tipo II y para la enfermedad cardiaca, haciendo el uso de medicamentos para bajar de peso un suplemento potencialmente significativo para algunos pacientes.
Los cinco medicamentos principales
Los resultados de un estudio publicado en junio en la revista Journal of the American Medical Association (JAMA) demostraron que todos los cinco medicamentos son eficaces: Qsymia, Saxenda también conocido como Victoza, Belviq, Contrave y Xenical, que también se vende como Alli.
Los investigadores encontraron que los pacientes que tomaron Qsymia perdieron la mayor cantidad de peso; un promedio de 19 libras en un año. Los pacientes que tomaron Xenical perdieron la menor cantidad de peso; 5.7 libras en un año. Sin embargo, los investigadores enfatizaron que los resultados dependen en escoger el medicamento que sea compatible con la condición médica del paciente. La lista de efectos secundarios potenciales y de precauciones en larga para todos los medicamentos para bajar de peso.
Para los pacientes obesos con diabetes, la Dra. Feito-Fernandez ha recetado a menudo el Saxenda, también conocido como Victoza que es otro medicamento que tuvo buenos resultados en el estudio. Los pacientes perdieron un promedio de 12 libras por año. Originalmente desarrollado para tratar la diabetes tipo II, este medicamento funciona al ayudar a controlar la digestión, la insulina y el azúcar en la sangre. Sin embargo, si los pacientes no cambian sus dietas, pueden resultar serios efectos secundarios.
“La mayoría de los pacientes bajan de peso, pero en realidad se trata de mantener esa pérdida de peso con los cambios que usted está haciendo”, dijo la Dra. Feito-Fernandez.
Porque muchos pacientes están desesperados por ver resultados, estos no consideran las implicaciones a largo plazo.
“Uno no puede estar tomando estos medicamentos para siempre”, dijo la Dra. Feito-Fernandez.