Mientras que los compradores abarrotan las tiendas durante el ajetreo de fin de año, las salas de emergencia también se llenan con más pacientes durante la época festiva. ¿Por qué?
El número de muertes relacionadas con asuntos cardiacos en los Estados Unidos aumenta por un 5 por ciento durante el mes de diciembre y las festividades del Año Nuevo, según un estudio [1] por parte de investigadores de University of California, San Diego y Tufts University. Las visitas diarias a los hospitales debido a la insuficiencia cardiaca pueden aumentar por un 33 por ciento durante los cuatro días después de Navidad, según un estudio [2]del 2008.
“La mayoría de los ataques cardiacos ocurren usualmente alrededor del día de Navidad y la víspera de Año Nuevo, resultando en un aumento en los pacientes en las salas de emergencia durante esos días y en las mañanas siguientes”, dijo Otto Vega, M.D., [3]director médico de servicios de emergencia de Homestead Hospital [4]. “Durante las festividades, la gente come más, bebe más y a menudo llenan los días más cortos del invierno con muchas actividades que no son parte de su rutina normal. Todas estas cosas se suman para poner al cuerpo bajo estrés, lo cual puede poner presión en el corazón y hacerlo trabajar más fuerte”.
Factores que contribuyen
Existen muchos otros factores asociados con los ataques cardiacos durante esta época del año, que están respaldados por la American Heart Association (AHA) y por el American College of Cardiology (ACC), dice el Dr. Vega. Estos incluyen:
- Estrés– Las actividades tales como los viajes y tener huéspedes o invitados a quienes atender pueden llevar al estrés físico y emocional. Las compras de regalos pueden generar presión financiera. Estas presiones pueden aumentar los niveles de la hormona del estrés, cortisol, en el cuerpo. Las personas con altos niveles de cortisol tienen cinco veces más probabilidades de morir por causa de un ataque cardiaco, un derrame cerebral u otras causas cardiovasculares, según una investigación publicada en la revista Journal of Clinical Endocrinology and Metabolism [5].
- No tomar los medicamentos– Las personas ocupadas con el ajetreo de las festividades a menudo olvidan tomar sus medicamentos, los dejan atrás cuando viajan lejos de casa o no pueden resurtirlos a tiempo.
- El aumento de peso durante las festividades– Esas pocas libras que tantas personas aumentan año tras año, pueden tener efectos duraderos. “La obesidad es la causa principal de morbidez prevenible”, dijo el Dr. Vega. “Más comorbilidades significan más alto riesgo para un ataque cardiaco”.
- No hacer ejercicio o hacer demasiado ejercicio – La gente dice que están demasiado ocupadas para hacer ejercicio durante la época festiva, o tratan de ponerse en forma demasiado rápido para lucir mejor. “Cuando alguien comienza un nuevo programa de ejercicios sin consultar con un médico, las cosas pueden ir muy mal”, dijo el Dr. Vega.
- Comer y beber demasiado– Comer una cena pesada, alta en grasa y en azúcar causa que aumente la presión sanguínea y el ritmo cardiaco, poniéndole una carga al corazón y al sistema digestivo. Como resultado, una persona puede experimentar acidez y dolores en el pecho que imitan los síntomas de un ataque cardiaco. De igual manera, beber demasiado alcohol también pone al cuerpo bajo presión haciendo que el corazón bombee más fuertemente para suplir sangre a las arterias periferales.
- Demasiada sal– El alto consumo de sodio también puede tener un efecto inmediato, causando retención de líquido que hace que el corazón tenga latir más fuerte.
Disminuya los riesgos
El riesgo para un ataque cardiaco es mayor para una persona que ha tenido un ataque cardiaco anteriormente y para aquellos que tienen condiciones cardiacas, tales como latidos irregulares y presión alta. Pero muchos pacientes “Coronarios Navideños” son personas que no se dan cuenta que están en riesgo.
Con prevención y moderación, es posible disfrutar de las festividades y mantener su corazón saludable, según el Dr. Vega. Él ofrece estos consejos para reducir el riesgo:
- Resurta sus medicamentos por adelantado para que no tenga que preocuparse por eso durante el ajetreo de las festividades.
- Mantenga una rutina regular de ejercicios; no comience una rutina drástica antes de las fiestas.
- Escuche las señales de su cuerpo. Varias de las señales de un ataque cardiaco pueden imitar como se siente una persona después de una comida fuerte o de andar corriendo que aquí para allá, tales como falta de aire o dolores en el pecho. “Es importante poner atención a cualquier síntoma que parezca fuera de lo normal, especialmente si usted tiene otras condiciones médicas”, dijo el Dr. Vega.
- Esté al tanto de sus amigos y familiares. Además de los pacientes actuales con problemas cardiacos, los ancianos y los diabéticos también tienen mayor riesgo para un ataque cardiaco, según el Dr. Vega. “Los diabéticos pueden tener daños en los nervios que previenen que estos sientan dolor, por ejemplo”, dijo él.
- Busque atención médica de inmediato. “Si usted está sufriendo un ataque cardiaco, los estudios demuestran que cualquier demora en su tratamiento puede disminuir la tasa de supervivencia”, dijo el Dr. Vega.
“La moderación es la clave”, dijo el Dr. Vega. No haga ningún cambio drástico en sus hábitos durante la época festiva. Sólo usted sabe mejor que nadie cuando su cuerpo está tratando de decirle que algo no anda bien. Si usted siente que algo no es normal para usted, llame a su médico o al 911. Es mejor precaver que tener que lamentar”.