La enfermedad cardiaca y el cáncer están en la posición número 1 y número 2 respectivamente, en cuanto a las causas principales de muerte en los Estados Unidos. Sin embargo, los avances en la prevención, detección y tratamiento de ambos, han impactado la cifra de muertes sobre un período de 45 años.
Las nuevas estadísticas publicadas por los Centros Para el Control y la Prevención de Enfermedades de los EE.UU [1] (CDC por sus siglas en inglés) demuestran que entre el 1969 y el 2014, las muertes tanto por enfermedad cardiaca y por cáncer han disminuido, con la enfermedad cardiaca demostrando la disminución más dramática entre las dos enfermedades. Sin embargo, a medida que la población crece y envejece, la cifra total de muertes por cáncer puede pronto superar las muertes causadas pos la enfermedad cardiaca – una proyección que no es del todo sorprendente cuando se consideran ciertos factores.
Una reducción en las muertes por enfermedad cardiaca
“Estos datos demuestran que estamos progresando en la prevención de la enfermedad cardiaca”, afirmó el cardiólogo Percy Aitken, M.D. [2], director de cardiología clínica y ecocardiografía, EKG y pruebas de esfuerzo para Miami Cardiac & Vascular Institute [3] de Doctors Hospital [4]. “Conocemos los factores de riesgo controlables para la enfermedad cardiaca, y a través de la educación, le hemos enseñado a la gente cómo cuidar mejor de su salud”.
Cambios de estilo de vida
El Dr. Aitken acredita los cambios al estilo de vida como la razón primordial para la reducción en la cifra de muertes. Él dice que las tendencias hacia las dietas basadas en las plantas y los granos enteros, el aumento en la actividad física y el dejar de fumar han contribuido a una reducción en los riesgos para la enfermedad cardiaca.
Medicamentos
Después de esos cambios de estilo de vida, los medicamentos tales como las estatinas, las cuales ayudan a prevenir la acumulación de colesterol en los vasos sanguíneos, también han contribuido a la reducción en la cifra de muertes, dice él. Él recuerda un tiempo, hace unos 20 años, cuando las salas de emergencia de los hospitales tenían varios pacientes de ataques cardiacos cada día. Ahora, dice él, hasta los hospitales más ocupados pueden ver solo unos cuantos ataques cardiacos por semana.
Herramientas de evaluación
El Dr. Aitken también identifica mejores herramientas de evaluación, tales como pruebas de sangre para determinar los niveles de colesterol, escanes por tomografía computarizada (CT) y ultrasonidos que ayudan a detectar la enfermedad cardiaca en sus primeras etapas, como contribuidores a la disminución en las cifras de muerte por enfermedad cardiaca.
Esperanza de vida
“No cabe duda de que estamos haciendo un buen trabajo en educar a la gente acerca de la prevención de la enfermedad cardiaca, detectándola más temprano y tratándola con mejor eficacia”, dijo él. Además el advierte que no debemos ponerle demasiada atención a un informe de diciembre de 2016 [5]por el National Center for Health Statistics que demuestra que la esperanza de vida promedio en los Estados Unidos está bajando – por primera vez desde el 1993 – de 78.9 años a 78.8 años. Ese informe demuestra que las muertes por enfermedad cardiaca aumentaron por un 0.9 por ciento desde el 2014 hasta el 2015.
“No se preocupe por ir en marcha atrás”, dijo él. “Un año de datos no es una tendencia significativa. No vamos a regresar e los tiempos de antes”.
Las muertes por cáncer superan las muertes por enfermedad cardiaca
Ese mismo sentimiento es compartido por el oncólogo Leonard Kalman, M.D. [6], quien es director auxiliar y oficial médico principal de Miami Cancer Institute [7]. “Es importante saber que las muertes por enfermedad cardiaca y por cáncer están decreciendo en general”, dijo él. Y aunque el informe por el National Center for Health Statistics [5]demostró una reducción en las muertes por cáncer entre el 2014 y el 2015, el informe por los CDC [1] indica que más personas morirán de cáncer que de enfermedad cardiaca en los próximos años.
La población que crece y envejece
“Nuestra población está envejeciendo”, afirmó el Dr. Kalman. “Si se está previniendo la enfermedad cardiaca, o a medida que mejoran los tratamientos usted vivirá más, entonces la edad es un factor clave en el desarrollo del cáncer”. Por eso, a medida que más personas alcanzan edades de 70 años y más, están más propensos a desarrollar algún tipo de cáncer, dijo él.
Con la enfermedad cardiaca, los tratamientos pueden manejar una condición con éxito indefinidamente. Con ciertos tipos de cáncer también, los mejores tratamientos han llevado a manejarlos como enfermedades crónicas por varios años. La diferencia es, sin embargo, según el Dr. Kalman, que aun con estos tratamientos, la mayoría de los pacientes de cáncer eventualmente sucumben por su enfermedad.
Aún así, el Dr. Kalman predice que las muertes por cáncer, especialmente entre los grupos más jóvenes, continuarán a decrecer a medida que se descubre más acerca de la enfermedad y se hacen disponibles más tratamientos y terapias enfocadas.
Mejores armas contra el cáncer
“Hemos visto un gran progreso en el tratamiento de algunos tipos de cáncer tales como el cáncer de seno, el cáncer de pulmón, el cáncer de colon, melanoma, linfoma no hodgkin [8] y el mieloma múltiple [9]”, dijo él. Mucho de este progreso es atribuible a un mejor entendimiento de la genómica de estas enfermedades y a nuevas capacidades para dirigir el propio sistema inmunológico del paciente contra su tumor, llevando a mejores tratamientos”.
Pruebas y genética
Mientras que sigue la controversia acerca de cuándo y cómo las mujeres con bajo riesgo para el cáncer de seno deben hacerse mamografías [10] y si un nivel de antígeno específico prostático [11] (PSA por sus siglas en inglés) es una buena herramienta de detección para el cáncer de próstata, el Dr. Kalman cree que la detección temprana de cualquier tipo de cáncer mejora las tasas de supervivencia.
Similarmente, el saber quién puede estar en riesgo debido a los factores genéticos contribuye a la detección temprana y el tratamiento. “Cuando podemos identificar a las personas que pueden tener estar propensas al cáncer, podemos tomar un enfoque proactivo hacia la prevención”, dijo él. “Estas personas pueden ser monitoreadas más de cerca, recetadas medicamentos para reducir su riesgo o ser ofrecidas procedimientos de cirugía preventiva en algunos casos”. La División de Genética Clínica de Miami Cancer Institute, por ejemplo, evaluará a los pacientes para detectar susceptibilidades genéticas al cáncer, educar a aquellos con más riesgo y asesorarlos acerca de las opciones de tratamiento.
Tratamientos
Una vez ha sido diagnosticado el cáncer, los tratamientos comprobados tales como la radioterapia y la quimioterapia, así como también los tratamientos emergentes tales como la inmunoterapia [12], las terapias dirigidas contra el cáncer [13] y la terapia de protones [14], las cuales pronto estarán disponibles en Miami Cancer Institute, están combatiendo el cáncer con más seguridad y con más eficacia.
Tendencias positivas
Ambos el Dr. Kalman y el Dr. Aitken están de acuerdo de que una tendencia hacia menos muertes por cáncer y por enfermedad cardiaca debe ser reconocida y el crédito atribuido , según ellos, a los avances en sus respectivas especialidades. Y mientras que el cáncer puede superar a la enfermedad cardiaca como la causa de muerte número uno de los estadounidenses en los próximos años, ellos atribuyen esos crecientes números a una población creciente y envejeciente.
“Lo que podemos estar viendo aquí es el producto de nuestro éxito en el tratamiento de la enfermedad cardiaca”, concluyó el Dr. Aitken. “Estas personas no murieron de la enfermedad cardiaca hace 10 o 15 años, así que ahora están en riesgo para el cáncer. Sin embargo, cualquier extensión de la vida hacia los años dorados es algo positivo”.