A medida que los atletas adolescentes siguen empujando los límites de fortaleza y velocidad, el riesgo de conmociones cerebrales es un peligro que nunca deja de estar presente. Una conmoción es un tipo de lesión cerebral traumática (TBI por sus siglas en inglés) causada por un golpe a la cabeza o por un impacto al cuerpo que causa que la cabeza y el cerebro se muevan rápidamente de atrás para adelante. En cualquier caso, el cerebro puede golpearse contra el cráneo, dañando las células cerebrales y causando síntomas tales como:
• La mirada vacía, la apariencia de estar aturdido o estupefacto
• Respuestas verbales y motoras retrasadas
• Confusión y la inhabilidad de enfocarse o poner atención
• Desorientación
• Habla lenta, mal articulada o incoherente
• Una descoordinación o desbalance observable
• Tiempo de reacción retrasado
• Emociones fuera de proporción con las circunstancias
• Pérdida de memoria
• Pérdida del conocimiento
• Dolor de cabeza
• Somnolencia
El mes de marzo es el Mes de la Concientización de la Lesión Cerebral. Los Centros Para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) estiman que alrededor de 250,000 niños (de 19 años o menores) fueron tratados en departamentos de emergencias de los EE.UU. por causa de lesiones de recreo que incluyeron el diagnóstico de una conmoción cerebral o TBI.
Richard Hamilton, Ph.D., director clínico del programa de rehabilitación de lesiones y conmociones cerebrales de Baptist Hospital dice que el aumento en la concientización también incluye la protección de los niños más pequeños, quienes son especialmente susceptibles a las lesiones cerebrales: “Los niños de escuela intermedia y elemental han estado descuidados hasta hace poco tiempor, pero todo eso está cambiando. Estamos estableciendo reglas para tratar de proteger a los pequeños”. Las escuelas tales como Our Lady of Lourdes Academy en South Miami colaboran con Baptist Health South Florida para educar, examinar y tratar a los atletas que pueden estar afectados por las conmociones cerebrales.