A pesar de un aumento en la concientización acerca de los peligros de la exposición excesiva a los rayos del sol, más estadounidenses que nunca están siendo diagnosticados con melanoma, la forma más seria de cáncer de la piel, según nuevos datos.
La incidencia de melanoma ha crecido de 22.2 casos por cada 100,000 personas a 23.6 casos por cada 100,000 personas, según han dicho los investigadores. Y más significativamente, más estadounidenses están muriendo por causa de la enfermedad, según el informe publicado en la revista JAMA Dermatology [1] de la American Medical Association.
Los investigadores han proyectado que alrededor de 10,100 estadounidenses morirán por causa de melanoma en el 2016, un aumento de las 8,650 muertes inicialmente calculadas en el 2009. En general, más estadounidenses están enfrentando melanomas tanto en sus primeras etapas como en las etapas más avanzadas, dijeron los investigadores.
El estudio encuentra que las tasas de melanoma han estado aumentando constantemente a través de los pasados siete años. Los nuevos datos para el 2016 muestran que una de cada 54 personas será diagnosticada con un melanoma invasivo, en comparación con una de cada 58 personas en el 2009, según los investigadores que repasaron las tasas de incidencias y muertes por melanoma.
El riesgo de por vida para el “melanoma in situ” – el cual implica solamente las capas superiores de la piel – ha aumentado aún más rápidamente, de una de cada 78 personas en el 2009 a una de cada 58 personas el día de hoy. El melanoma in situ puede convertirse en invasivo. Las probabilidades de desarrollar cualquiera de los dos tipos de melanoma, in situ o invasivo en el transcurso de una vida, han aumentado a una de cada 28 personas, según el estudio.
Las tasas actuales de melanoma probablemente son aún más altas
Los diagnósticos de melanoma no están siendo reportados adecuadamente, según el estudio, lo que significa que las tasas actuales son probablemente más altas. Eso es debido a que el melanoma no es una enfermedad reportable en muchos estados y “algunos tumores son sometidos a biopsia y extirpados en un entorno ambulatorio que puede pasar por alto los registros de tumores de los hospitales si se analizan en laboratorios de patología que no forman parte de un hospital”, dijeron los investigadores.
En general, un estimado de 76,380 estadounidenses serán diagnosticados con melanoma en el 2016, afirmó un equipo dirigido por el Dr. Alex Glazer de la National Society for Cutaneous Medicine en la cuidad de Nueva York.
La predisposición genética es un factor de riesgo mayor para el melanoma, y han sido identificados varios genes de susceptibilidad para el melanoma. Aún así, no cabe duda de que la exposición al sol desempeña un papel importante”, afirmó la dermatóloga Alysa Herman, M.D. [2], cirujana de cáncer de la piel afiliada con Baptist Hospital, Doctors Hospital y South Miami Hospital. Ella añade que la exposición infrecuente pero intensa al sol, que a veces conduce a las quemaduras solares, puede aumentar el riesgo de una persona para desarrollar melanoma.
Un creciente número de adultos jóvenes están siendo diagnosticados con cáncer de la piel, y esa tendencia incluye un aumento en la incidencia de los casos de melanoma, dijo ella.
“Es sorprendente para mi cuando veo a los jóvenes bronceados o quemados”, dijo la Dra. Herman. “El cáncer de la piel era una vez una enfermedad para las personas mayores. Es muy difícil conseguir que las personas jóvenes cambien su comportamiento”.
El impacto de la detección precoz
Los estudios previos han indicado que los casos diagnosticados de melanoma invasivo están aumentando más rápidamente que la tasa de muerte por melanoma, sugiriendo que la detección precoz sí tiene un impacto. Sin embargo, esa tendencia parece haberse reversado, basado en nuevos hallazgos que sugieren que la detección precoz aún no ha hecho un impacto significativo en la tasa de muerte por causa del melanoma.
“A pesar del Llamado de Atención del Cirujano General en el 2014 para Prevenir el Cáncer de la Piel, los resultados de este estudio demuestran que la incidencia de melanoma invasivo en los Estados Unidos está aumentando más que la tasa de muerte en una trayectoria menor durante los pasados 7 años”, concluyeron los autores del estudio.
He aquí algunos consejos para la mejor protección contra el cáncer de la piel:
- Aplíquese un protector solar de amplio espectro con un factor de protección solar (SPF por sus siglas en inglés) de por lo menos 30, diariamente. Reaplique por lo menos cada dos horas cuando esté en exteriores (se necesita una onza para cubrir la mayoría del cuerpo).
- Use ropa protectora, incluyendo sombrero de ala ancha y gafas de sol con protección total UV.
- Evite la sobre-exposición al sol, especialmente entre las hora de 10 a.m. y 4 p.m., si es posible. Y definitivamente evite las quemaduras de sol.
- Hágase autoexámenes mensuales de la piel y vea a un médico una vez al año para un examen de evaluación profesional. Usted puede utilizar los recursos por internet de skincancer.org [3] para ayudarle a reconocer los lunares o los crecimientos en su piel que pueden estar desarrollándose en cáncer de la piel.
- Aléjese de los salones de bronceado. Sólo una sesión de bronceado interior puede aumentar el riesgo para el melanoma por un 20 por ciento.